martes, 7 de septiembre de 2010

TEMA 1. PRIMERO DE BACHILLERATO.

OBJETIVOS.



En esta unidad nos proponemos:




1. Saber dónde estamos: En que etapa de nuestra vida nos hallamos y qué significa esta etapa.




2. Conocernos en profundidad: saber quiénes somos y qué estamos llamados a ser.




3. Saber adónde vamos: ver dónde buscamos la felicidad y anticiparnos a nuestro futuro.




4. Descubrir qué nos aporta la religión en esta búsqueda: apertura al sentido de la trascendencia, revelación del misterio de Dios y del sentido de la vida.




1. JUVENTUD, IDENTIDAD Y CRISIS DE SENTIDO.




 




Vivir es crecer, madurar, caminar. Así lo experimentamos, sobre todo, cuando llega la adolescencia o edad del crecimiento acelerado. Pero ¿tiene nuestro crecer un sentido o es un simple proceso biológico?




Hasta los 17 o 20 años crecemos. Seguimos madurando hasta los 40 o 50.. Llegamos a la cumbre y comenzamos a bajar hasta desaparecer bajo la muerte. ¿Qué sentido tiene entonces crecer, madurar, subir, sabiendo que a la mitad del camino iniciamos el descenso?







“Crecer, madurar, es el empeño característico de la juventud. En el ámbito biológico, cuando te detienes, cuando ya no creces, es señal de que comienzas a envejecer. Esta ley vale también para el espíritu, con la diferencia de que el espíritu no tiene límites biológicos de crecimiento. Precisamente por esta razón no puede envejecer” (Juan Pablo II).

Serás un hombre (R.Kipling).




“ Si puedes ver destrozada la obra de tu vida,



y sin decir una palabra ponerte a rehacerla;




o perder, de un solo golpe, lo que ganaste en cien batallas,




sin hacer un gesto ni lanzar un suspiro;




si eres capaz de amar sin enloquecer de amor,




si puedes ser fuerte sin perder la ternura,




y al sentirte odiado, luchar y defenderte,




sin devolver el odio;




si consigues meditar, observar y conocer,




sin hacerte un escéptico o un amargado,




soñar sin que los sueños te dominen,



pensar sin ser más que eso, un pensador;




entonces los reyes, los dioses, la suerte y la victoria



serán siempre esclavos a tu servicio,




y lo que es mejor que los reyes y la gloria,




serás, hijo mío, un hombre.”



Cuestiones:



1. Ante los fracasos, ¿me hundo o me rehago? ¿no siento nada?




2. Ante las desgracias, ¿caigo en el victimismo o tengo entereza?




3. Ante el amor, ¿rindo menos en el trabajo, más o igual?




4. Ante la gente, ¿soy amable, distante o agresivo?



5. Ante el mal recibido, ¿me defiendo sin hacer mal? ¿soy capaz de perdonar? ¿O me siento dominado por el odio?



6. Ante la injusticia, ¿lucho? ¿O lo siento pero no hago nada?



7. Ante las grandes preguntas, ¿paso o me gusta pensar y discutir? ¿Me siento mal?




8. Ante los grandes ideales, ¿me río, me dedico solo a soñar, o me esfuerzo por mejorar la realidad?




Juventud, ¿tiempo de inquietudes y expectativas?

 


Según las encuestas, la mayoría de los jóvenes (el 70%) piensan, desean y actúan en términos de integración social, asumiendo los rasgos propios de la sociedad posmoderna, como:




Mentalidad consumista: La actual generación joven ha nacido y crecido en la sociedad de consumo, asumiendo de forma natural –sin conciencia crítica- la condición consumista. Los jóvenes ya no saben divertirse si no es consumiendo.




Individualismo pragmático: Los jóvenes de hoy han nacido y crecido en una sociedad con grandes cuotas de paro, donde cada cual se las tiene que arreglar por su cuenta para encontrar un trabajo que les permita mantener el nivel de consumo. Los jóvenes han asumido también este individualismo, que contamina los derechos y valores humanos como la libertad, la igualdad, la tolerancia, etc... dándoles un sentido individual y privado. Narcisismo como justificación de los egoísmos.




Vitalismo: como deseo de disfrutar de la vida aquí y ahora. Los jóvenes de hoy son hijos de padres que han visto incumplidas las promesas de felicidad del progreso; esto ha generado un deseo de vivir a tope el presente como el único tiempo verdaderamente valioso, pues el futuro parece incierto y sombrío y el pasado ya no interesa. Frente a la vieja moral de la austeridad y del sacrificio, la actual generación ha crecido en la nueva moral hedonista del deseo y del goce inmediato.

 Resultat d'imatges per a "nihilismo"


Nihilismo: (del latín nihil, nada). Se presenta como falta de fundamento, pérdida del sentido profundo, ausencia de proyectos y utopías, falta de horizontes, apatía; como actitud negativa, escéptica, radicalmente crítica y destructiva frente a los valores de la modernidad; en definitiva, como gran vacío que los más jóvenes llenan de “luz y sonido”, reduciendo toda la realidad a solo flas, a pura apariencia, cambio constante, moda, imagen, color, diseño, marcas, seducción, espectáculo, presencia externa, exhibición ostentosa incluso de la propia marginalidad.




Hoy, a nuestros jóvenes les sobran medios para vivir pero les faltan razones. La mayoría de los jóvenes nacidos en los países del bienestar no conocen más razones para vivir que tener dinero y divertirse. De esta manera confunden los medios de vida con los fines para los que se vive, y el resultado es la ansiedad, la insatisfacción, la decepción, la apatía....




El Evangelio les propone:

 Resultat d'imatges per a "reino de dios"



• Buscad el Reino de Dios y su justicia y lo demás se os dará por añadidura (Mt 6,36). En un mundo donde cada cual tiene que pelear por un puesto de trabajo, sabiendo que muchos quedarán en paro, ¿no es mejor trabajar por un sistema más justo?




• La verdad os hará libres (Jn 8,32).  

Frente al poder manipulador que se esconde detrás de muchas necesidades, aficiones, modas, gustos.... ¿no seremos más libres si desenmascaramos la manipulación y buscamos la verdad?




• Amad a vuestros enemigos (Mt 5,44). Frente a un mundo dividido en amigos y enemigos, el amor es la única fuerza capaz de vencer al enemigo convirtiéndolo en amigo.



Resultat d'imatges per a "paz"

• Mi paz os dejo, mi paz os doy, una paz que el mundo no puede dar (Jn 14,27). Frente a un mundo que se empeña en conseguir la paz con la guerra, no consiguiendo así más paz que la de los cementerios, el Evangelio nos ofrece la verdadera paz que llena de vida y alegría a los pueblos.




2. CONOCERSE A SÍ MISMO.




Significa:




• Tener conciencia de la propia existencia. Al ser humano no le basta existir como un objeto cualquiera o como “una cosa tonta”. Necesita saber que existe, que está aquí y ahora. Los objetos están ahí, pero no saben que están. El ser humano es el único en el mundo que tiene conciencia de sí mismo. El que no tiene conciencia de su existencia es como si no existiera.





• Concebirse como sujeto, sentirse persona. El ser humano empieza a sentirse persona en el trato personal, donde experimenta confianza, aprecio, consideración de su dignidad, etc.., donde uno deja de sentirse gente y se siente él mismo, deja de ser objeto y se convierte en sujeto.






• Saber para qué estamos aquí en el mundo. Cuál es nuestro papel, nuestra relación con las demás personas y con las cosas, nuestra relación con el más acá y con el más allá. Nuestro ser se revela en la apertura a los demás, en el diálogo, en el ejercicio de la libertad, en la acción, en la experiencia..., haciéndonos ver que somos seres con sentido, sociales, libres, creativos.




• Tomar conciencia de la propia singularidad. Cada uno de nosotros viene a este mundo como un ser original, irrepetible y único. Conocerse a sí mismo significa tomar conciencia de las propias cualidades, talentos, aptitudes..., y también de las propias limitaciones, carencias, servidumbres..., así como de las legítimas aspiraciones, ideales y vocación.




3. BÚSQUEDA DEL SENTIDO DE LA VIDA.








Cuenta un mito griego que Sísifo,  legendario rey de Corinto, se rebeló contra los dioses, logrando encadenar a Thanatos (la muerte). Por ello, los dioses lo condenaron a empujar eternamente, ladera arriba de una montaña, un enorme peñasco, que siempre volvía a caer antes de llegar a la cima.



¿Es este el destino del hombre?


Para A. Camus la vida carece de sentido, todo es absurdo, discordante, disonante. Esta disonancia resulta de la confrontación entre lo irracional del mundo y el deseo desenfrenado de claridad, cuyo llamamiento resuena en lo más profundo del mundo.



Para Shopenhauer, entre la realidad y el deseo humano de felicidad existe una disonancia total, expresada maravillosamente en las artes, especialmente en la música. De acuerdo con la filosofía budista, mantenía que lo único real es el dolor. Por lo tanto, el deseo humano de felicidad es absurdo. La única salida es la resignación, el desapego del ego, la disolución de la individualidad y la inmersión en la nada.



Para V.E.Frankl, no es posible la salud espiritual si no se resuelve positivamente el problema del sentido de la vida. Cuando alguien pierde el sentido de la vida, pierde también la razón de existir y las ganas de vivir; y aunque sea psíquicamente sano, está espiritualmente enfermo.




4. SENTIDO DE TRASCENDENCIA.




Los grandes interrogantes humanos nos conducen a la religión; en ella los seres humanos encuentran el sentido último que ilumina toda la existencia; quiénes somos, de dónde venimos, a dónde vamos.



La religión se basa en la apertura del ser humano al sentido último que trasciende su capacidad racional, es decir, en la apertura a la realidad trascendente y absoluta.


Dios es un misterio y, como tal, es inaccesible al ser humano. No podemos alcanzarlo con los sentidos ni comprenderlo. Pero tampoco podemos prescindir de Él, ya que está en la entraña de nuestro ser. Dios es un interrogante que todos nos hacemos, una cuestión vital y trascendental, pues en ella nos jugamos el sentido de nuestra vida.




Pero si Dios es inaccesible, ¿cómo podemos reconocerlo? Dios se manifiesta no directamente, pero sí de forma indirecta por medio de realidades accesibles al ser humano. Dios se manifiesta en la naturaleza (astros, lluvia, montañas, ríos, paisajes...), en la historia (acontecimientos, personajes) y en la vida de las personas (nacimiento, enfermedad, muerte, esperanza, amor...).



Estas realidades sensibles adquieren un carácter simbólico: significan más de lo que son en sí mismas. Los símbolos son objetos perceptibles que representan algo imperceptible en virtud de su analogía o parecido interior: el sol no es una estrella sino un símbolo de Dios que alumbra la existencia; el cielo no es la atmósfera que rodea la tierra, sino símbolo del paraíso o estado de felicidad al que todos aspiramos.



Pero tampoco hay que confundir los símbolos de la divinidad con la divinidad misma, adorándolos como si fueran dioses (idolatría).




Quienes somos, de dónde venimos, adonde vamos (Siniestro Total)






¿Cuándo fue el Gran Estallido?



¿Dónde estamos antes de nacer?




¿Dónde está el eslabón perdido?




¿Dónde vamos después de morir?




¿Qué son los agujeros negros?




¿Se expande el universo?




¿Es cóncavo o convexo?




¿Quienes somos?




¿De dónde venimos?




¿Adonde vamos?




¿Estamos solos en la galaxia o acompañados?




¿Y si existe un más allá?




¿Y si hay reencarnación?




¿Quienes somos?




¿De dónde venimos?




¿Adonde vamos?




¿Estamos solos en la galaxia o acompañados?




¿Qué es el ser?




¿Qué es la esencia?




¿Qué es la nada?




¿Qué es la eternidad?




¿Somos alma?




¿Somos materia?




¿Somos sólo fruto del azar?




¿Es fiable el carbono 14?




¿Es nuestro antepasado el hombre de Orce?




¿Quienes somos?




¿De dónde venimos?




¿Adonde vamos?




¿Estamos solos en la galaxia o acompañados?




¿Y si existe un más allá?




¿Y si hay reencarnación?



Son preguntas que nos hacemos las personas. También deseamos tener la respuesta porque en ellas nos va la vida. La amistad, el amor, estudio, diversión, éxito, ilusiones y proyectos. En la respuesta a estas preguntas es donde queremos apoyar nuestra identidad. En definitiva, queremos saber quienes somos de dónde venimos, a dónde vamos.



Entre todas las preguntas las hay que inciden en la felicidad personal. Otras tienen un carácter científico y objetivo.



También faltan otras muchas. Intenta hacértelas tu con imaginación, reflexión y creatividad. Todas las que se te ocurran. a buscar tus propias respuestas.




Mientras estás en esta etapa educativa son muchas las áreas o asignaturas donde puedes encontrarlas. Te invito por un momento a pararte y pensar, razonar, dialogar, escribir, sacar conclusiones, seguir preguntándote. No te detengas en ello.




En nuestra sociedad actual podemos encontrar muchas y variadas respuestas. Comentaremos las más representativas en otro momento.




Como ves es inevitable hacernos estas y otras muchas preguntas sobre "El Sentido de la Vida". En ocasiones pensamos que podemos vivir ignorándolas, sin planteárnoslas ni respondérnoslas. Tarde o temprano, ante ciertos acontecimientos de nuestra vida, necesitamos darnos una respuesta en profundidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario